El proyecto se basa en una reforma de una vivienda existente en Petrer de 104 m2 construidos.
El objetivo principal del proyecto fue buscar el máximo aprovechamiento de la superficie. El anterior patio de la planta baja pasa a cubrirse para aumentar el espacio interior, manteniendo mediante una claraboya las necesidades de la iluminación y la ventilación natural. Conseguimos una planta baja funcional y con todos los usos conectados visualmente para maximizar la sensación de amplitud. Se diseña una escalera que alberga en su interior todo el almacenamiento necesario de esta planta baja.
La planta superior incluye ahora 3 dormitorios y 2 baños. Dado que este programa obliga a una mayor división del espacio, se aporta ventilación e iluminación natural mediante el patio preexistente. De este modo, este pequeño patio consigue iluminar el dormitorio principal y su baño, uno de los dormitorios secundarios y la zona de cocina/comedor en la planta inferior mediante la claraboya.
La continuidad espacial deseada se reafirma con la utilización del mismo pavimento en toda la vivienda, un pavimento porcelánico en formato 60x60cm, consiguiendo un aspecto uniforme, elegante y sereno. Domina en el ambiente un contraste armonioso entre las superficies neutras de pavimento y paredes y las superficies cálidas de los techos de madera.