“Desde Suiza con amor” es una obra fruto de esfuerzos y sentimientos encontrados entre Suiza y España.
Para nosotros, el proyecto de una vivienda es la construcción de una identidad, y la identidad de este proyecto es una historia de emigración.
Este trabajo supone la construcción de la primera vivienda en propiedad de los clientes, la construcción de algo sentido como propio tras 42 años continuados de trabajo y vida en Suiza, en un momento de sus vidas en el que el retiro y la vuelta a casa enfoca todos los argumentos de proyecto.
Es un antes y un después en sus vidas, un punto de inflexión en el que el sencillo concepto “BEFORE//AFTER” nos da algunas de las claves que han condicionado el proyecto. Dicen que “cualquier tiempo pasado, fue mejor” y es que muchas veces se añora aquello que se ha perdido, aquello de lo que no se puede disfrutar. Es lógica esta evocación nostálgica de tiempos anteriores sobre todo cuando se echa de menos otras costumbres y otras circunstancias que se consideran preferibles a las presentes, no obstante esto no está tan claro en todos los casos y esta casa ha sido diseñada de manera que sea compatible con el estilo de vida mediterráneo y evoque el pasado vivido en otros países, en otro tiempo.
La vivienda trata de organizarse alrededor de un continuo “celebrar el momento”, proponiéndose resultar un entorno adecuado para ese estado continuo de disfrute, de relajación y de proyección de los deseos de uno mismo. Es una casa para la reunión familiar, una reunión casi continua en la que se recupera el tiempo perdido entre las fronteras de Suiza, Italia y España.
Técnicamente partíamos de una “carcasa”, unos muros y un forjado con una estructura en mal estado y sin ningún tipo de protección térmica o acústica, resultado de un proceso de sucesivas adiciones, reparaciones y modificaciones parciales que se fueron dilatando en el tiempo más de 25 años.
Subsanado el acondicionamiento térmico y acústico de la “carcasa”, hicimos entrar la luz en el corazón de la vivienda, equilibrando la iluminación de la zona de día, y generando en el patio un espacio ambiguo que permite, mediante un techo móvil de policarbonato, incluir en la cocina una vista sesgada del cielo en posición abierta, o bien una iluminación sedosa del espacio en posición cerrada. En la cocina es donde se inician siempre las reuniones, las charlas en torno a la gran isla que compone el espacio para cocinar y disfrutar de la familia en torno a la comida y a la tradición mediterránea.
Los ligeros cambios de altura en los techos junto con el uso de distintos materiales de acabado permiten una identificación clara de las distintas estancias, aunque se desarrollen en un espacio continuo. Las variaciones de altura y la suspensión de elementos como la chimenea, cuyo cuerpo inferior es capaz de rotar 360º y enfocar el fuego del hogar en las distintas orientaciones, tratan de lograr una cierta sensación de tridimensionalidad que nos libre, en la medida de lo posible, de la dictadura del forjado plano y continuo de 260 cm de altura libre.
El uso del color de manera puntual pero contundente en el césped artificial azul, que con la iluminación natural, equilibra y cualifica los tonos cálidos de la madera y el neutral vinilo gris de la cocina.
En los dos baños, resueltos en vidrio y con un pavimento continuo que incluye las duchas, el uso respectivo del color naranja y fucsia imprime identidad a cada uno de ellos aunque estén resueltos con un esquema prácticamente idéntico.
Por último la utilización profusa de la madera en distintas formas (tarima, contrachapados fenólicos, tableros acústicos de viruta, mobiliario) alude a la idea de tocar con manos y pies desnudos, caminar descalzo ‘leyendo’ la veta de la madera natural, siguiendo la tradición suiza de dejar el calzado en la entrada de la casa.
El proyecto quedó así configurado pensando en la vida interior y en el disfrute de sus espacios a través del “después” y dejando el “antes” en el recuerdo de una vida pasada patente en muchos detalles de este hogar que se asienta en las afueras de un municipio del interior de Alicante: Agost.