Reciclar: proceso de convertir desechos en nuevos productos para prevenir el desuso de materiales potencialmente útiles, reducir el consumo de nueva materia prima, reducir el uso de energía y reducir la contaminación. Es el tercer componente de las 3R reducir, reutilizar, reciclar.
I love recycled es un nuevo concepto de bar por muchas de sus características.
La premisa de los promotores fue un proyecto Low-Cost y ultrarápido en su ejecución (35 días), todo un récord.
El entorno determina el planteamiento, ya que el local está ubicado en el paseo marítimo de Santa Pola, con unas vistas privilegiadas y un uso exclusivamente estacionario en verano.
Por ello, se diseña el espacio para que los clientes estén en el exterior, dejando la zona interior para barras, servicio de camareros, mesa de DJ, aseos y almacén.
Debido a la configuración del local, siendo un cuadrado exento con tres fachadas, una de ellas al mar se plantea un bar simétrico en cuanto a su disposición, pero con dos zonas diferenciadas por los materiales empleados y el concepto que se les quiere dar. Estas dos zonas se unen mediante un espacio dedicado a la mesa de Dj y circulaciones.
La idea de negocio era cubrir la máxima amplitud de clientela sin mezclarla, es decir, que clientes de edades y hábitos de consumo diferentes convivieran de forma cómoda encontrando cada uno su propio espacio.
En el nombre del local, el logo y la comunicación se intentó condensar la esencia del proyecto, haciendo una clara referencia al reciclaje utilizándose la impresión digital de papel arrugado, corazones y siluetas para transmitir una imagen clara, divertida y sencilla. Los stencils sobre madera le dan compacidad e identidad corporativa al proyecto.
En cuanto a la ejecución se optó por utilizar materiales reciclados y básicos de construcción, dándoles un segundo uso y connotaciones distintas para diferenciar las zonas.
Se plantea una zona destinada al público más joven que está representada por la madera de palets. Las bebidas en esa zona serán también low cost, se servirán en formato grande y las marcas serán medias. El mobiliario se realiza con palets, sillas de colegio tapizadas con telas de toldos, cajas de fruta, neumáticos, bobinas de cable eléctrico…. Líneas sencillas y divertidas para atraer a un público joven.
Justo en la parte opuesta se plantea una zona destinada a público de mayor edad y con diferente poder adquisitivo representada por la armadura de acero corrugado pintada en colores celeste y dorado. Este tratamiento dignifica al material consiguiendo un efecto casi lujoso. Con este recurso se crea una trasera de barra/botellero formada por unos cubos celestes colgados sobre parrilla dorada que dan ritmo y un aspecto muy cuidado a esa zona. Las bebidas en esta barra se servirán en formato más elaborado y las marcas serán Premium.
En esta zona también se dispone mobiliario más fino y trabajado, con el acero corrugado y la madera como protagonista.
En el nexo de unión de ambas zonas se dispusieron cajas de verdura elaborando una gran lámpara suspendida, la mesa del DJ y un jardín vertical para la distribución de entrada a los aseos.
El resultado final es una gran terraza heterogénea y original que no pasa desapercibida al viandante vinculada a un modelo de negocio que diferencia tipología de clientela para acomodarse a sus gustos y necesidades. Todo un éxito.