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Un bajo situado en el barrio histórico de Velluters de Valencia, dentro de un edificio de los años 60. El proyecto supone la renovación de un espacio que ha sido siempre un taller profesional con un claro carácter industrial o artesano. Esta estética industrial, presente en sus portones metálicos supone una inspiración que se desea rescatar para rediseñar el espacio. Se proyecta un espacio diáfano y fluido, incorporando 3 curvas a la distribución del espacio. En la distribución originaria del espacio ya se evidenciaba la presencia de un muro curvo que albergaba el núcleo de comunicaciones del edificio. Este elemento de directriz curvilínea se potencia y se amplifica, trazando sendas curvas más que otorgan al espacio una distribución abierta y fluida. Estas nuevas piezas curvas añadidas a la distribución esconden un almacén de obras con pared curva y un aseo en el patio exterior resuelto en termoarcilla, también curvilíneo. Si bien la forma curva es una premisa esencial del proyecto, cabe resaltar que la operación estratégica del proyecto ha sido la apertura total del patio interior, cegado originalmente. Se ha producido la apertura y total permeabilidad visual hacia este patio mediante la colocación de sendas carpinterías de acero sujetas directamente al pórtico estructural de hormigón. Este patio pasas ser el verdadero corazón del proyecto. Su calidez y confort ambiental aporta al espacio una cualidad inesperada, aportando luz natural, frescor y vegetación. El espacio consta de una galería frontal concebida como un espacio expositivo donde se ubica un “cubo negro” pensado para realizar instalaciones lumínicas y como estudio de fotografía. La fachada se piensa como gran superficie expositiva, situando grandes ventanales que permiten la contemplación de las obras y el material expositivo. A su vez se coloca una pequeña hornacina en fachada para albergar piezas expositivas de pequeño formato. El proyecto dispone de paredes y techos técnicos, capaces de alojar instalaciones y servir de soporte para la función expositiva. El suelo se resuelve mediante parqué sobre rastreles. El baño hace alusión al concepto de la propio espacio, “higiene”, proyectándose como un espacio aséptico, casi un quirófano iluminado cenitalmente por un lucernario.

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